miércoles, 2 de octubre de 2013

El Barbas es mi amigo de Facebook

Acabo de agregar en Facebook “al Barbas”…que quién es “el Barbas”? …mi entrenador de balonmano…ehhhh…se me calmen esas risas!!!...hay algo que aún no sabéis de mí, y es que tengo un pasado como deportista de élite, como seria promesa del deporte nacional, como estandarte de la vida en chándal…oye!! Que escucho las carcajadas desde aquí!! …bueno, algo exagerado este enfoque…teniendo en cuenta que tendría unos…12-14 años…éramos la leche. 
El Barbas era alto y espigado, de barba espesa y ya canosa, como un silbidito de delgado y difícil de ver quieto en ninguna parte. Era ansioso dando clases y mucho más en el campo. Cura de mi colegio (religioso más bien), pero costaba relacionarle con una misa y la meditación, era duro… muy duro…no porque nos chillara, que también…no porque los entrenamientos fueran duros, que también…no porque echara miradas asesinas ante el más mínimo error, que también…sino porque era casi imposible que se fuera contento después de un partido, hiciéramos lo que hiciéramos, aunque duplicáramos el marcador de tías mucho más grandes que nosotras, aunque se levantaran las gradas en aplausos, …era imposible hacerle feliz, por mucho que lo intentáramos, y era frustrante. Creo que llegué a odiarlo, que le llamé en bajito cosas que ni sabía que significaban pero que me sonaban fatal...creo que consiguió desquiciarme muchas veces, pero... 

Hasta que llegó el día…jugábamos la final del campeonato y estábamos atacadas. Como era
costumbre llegamos corriendo al campo, no sé si era casualidad que nunca calculáramos bien el tren que nos dejaba con tiempo o era todo una estrategia para hacer el precalentamiento corriendo por las calles Bilbaínas, lloviendo por supuesto, y esquivando a las viejitas que a pesar de llevar paraguas se empeñan en ir bajo las cornisas y que las rodees (todo un clásico extendido por el País Vasco) aunque tengas que meterte hasta las rodillas en un charco, con lo cómodo que es jugar un partido con las deportivas empapadas y chirriando. Llegamos, nos cambiamos, y a dar vueltas al campo…recordad que llevábamos media hora corriendo con obstáculos…vengaaaaaaaaaaaaaaaaaa!!!!!!!!!! Pita el árbitro!!

 
Fue un partido espectacular, con goles imposibles, escuadras y faltas duras, vaselinas y demás filigranas…y un momento cumbre en mi carrera como portera (porque yo era la portera…aunque os cueste creerlo): parada con plena jeta de un punto decisivo!!! Se levantan las gradas aplaudiendo como locos mientras lloro como un bebe…apenas puedo ver y me cabreo pensando que aplauden la enorme leche que me he llevado…a , no, coño!! Que me aplauden a mí!!! Olé olé!! igual acabo en el hospital pero soy muy grande!!!  
Pitan el final del partido y el Barbas, largo como un día sin pan, salta desde el banco en el que no conseguía relajarse hasta mitad del campo!!! SI, SI , SI!!! ESTAS SON MIS CHICAS!!! 12 niñas llorando como bebés de la sorpresa, de la emoción de ver orgullo en su mirada, de ver por fin satisfacción!!! Mañana a las 6 os quiero dando vueltas…a sus órdenes Barbas!! Somos tus chicas!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
Nunca me he sentido más orgullosa de mí misma que en aquel partido, ni por un ascenso, ni por una buena crítica, ni por un aplauso…nunca he sentido de forma tan clara que el esfuerzo tenía su recompensa, que la perseverancia te hace brillar…nunca nadie me ha mirado con ese brillo de satisfacción infinita como me miró el Barbas esa mañana, y nunca volver al tajo ha sido tan deseado.
Ahora el Barbas es mi amigo de Facebook…me gustaría contarle en persona todo lo que me ayudó que fuera tan duro conmigo, espero que lea este pequeño homenaje, es una una etapa de mi vida que me encanta recordar, porque lo conseguimos tras mucho trabajo, porque el Barbas estuvo por fin orgulloso de entrenar a un pequeño equipo de gente pequeña en un pueblo pequeño.
PD: a todas mis chicas del equipo, qué grandes fuimos siendo tan pequeñas!! besooooooooooooooooooooo