Conviértete en mi Cyrano

Conocéis la historia de Cyrano de Bergerac?? (Una de mis películas favoritas sin duda que la semana pasada retomé para volver a creer en el amor poético...). Resumo: un bello pero limitado galán acepta que un feo pero increíblemente sensible colega (Cyrano) le asesore en la conquista de su dama...le dicta en susurros bajo el balcón lo que tiene que decir, escribe poemas para él...ella se enamora de un corazón y un cuerpo distintos...la belleza de uno y el alma de otro...

Atención: Se busca Cyrano para ayudarme con una nueva conquista.

Me he planteado poner un anuncio semejante en el periódico y en primera plana. Ojala pudiéramos acceder a Cyranos profesionales que nos dictasen la frase adecuada, la expresión perfecta, para conseguir que la persona que nos quita el sueño caiga rendida a nuestros pies...o simplemente que evite que metamos la pata, que nos adelantemos, que perdamos la gracia...eso sí, un Cyrano que no enamore a la/el susodicha/o...que así pierde encanto la ayuda...

Y es que cuántas veces hemos pensado...Noooooooooooooooooooooo...por qué no me habré quedado callada???? o...por qué he dicho eso que justo suena a lo contrario de lo que siento???? Cuántas veces hemos acabado una conversación satisfechos y al repasar mentalmente lo dicho hemos alucinado con que no nos mandaran a la mierda antes de acabar alguna frase??? A mí al menos me ha pasado bastaaaantes veces...alguna vez por sobrada, otras por falta de picardía, otras por pesada, no pocas por parecer simplemente estúpida...Si yo ni siquiera le pediría fiabilidad de un 100%, me conformo con poder echarle la culpa a él en lugar de a mí!!!!

Ya lo veo...pinganillo en el oído y me adentro en el bar...

Yo: hola nene, qué tal la semana?

Él: hola guapa, muy bien y la tuya?

(y la mía??? que en el contrato está establecido que intervienes toda la noche!!!! habla coño!!)

Cyrano en mi oído: muy tranquilita, me pasé los días pensando en tus ojos...

( pero qué moñas es mi Cyrano por Dios!!!)

Yo: muy bien, no he parado, cenas, cine, copas...

Él: pero no tenías que estudiar y por eso no nos veíamos???

(mierda, por qué me empeño en pagarle a alguien para no hacerle ni caso? grrrrrrrrrr)

No, visto así...o voy a ser dócil con mi Cyrano o mejor invierto el dinero en invitar al mozo a copas para que se le pase el cabreo ;-)

Y es que el finde pasado yo solté un discurso, la mar de convincente, a un chiquito...hijos, y le vi convencido...así que esperaba que me ardiera el móvil...y hasta hoy...cómo lo veis? debí equivocarme en alguna parte del discurso, así que lo volveré a intentar cuando le vea...que a perseverante no me gana ningún Cyrano...

Que también os digo una cosa...todos somos bastante Cyranos, porque a quién no se le da bien eso de decir a los demás qué hubiéramos hecho o dicho en su lugar??? Cada lunes tengo 3 Cyranos en la oficina, yo cuento el finde a mis compañeras de trabajo y ellas diseñan una escena semejante a la vivida pero sin duda mejorada!!! y luego me toca a mí hacer lo mismo...

Maestros de lo ajeno...eso es muy español...y para lo nuestro taaaaaan torpes!!!